Un día con la manada de Flakes

Mi alarma suena a las 3:15 a.m. Suavemente, despierto a Kate, que duerme mejor que yo.  Ella se arrastra a la cocina para desayunar mientras me visto. Escucho un pequeño chillido de alegría de ella, que supongo está asociado con el descubrimiento de algún ingrediente particularmente bueno para el desayuno. Pronto, sin embargo, se me demuestra que estoy equivocada cuando abre la puerta, toma su cámara y dice: “¡Mami, ven a ver! ¡Hay una tarántula en el colchón! " Habíamos pasado algún tiempo el día anterior leyendo un libro maravilloso sobre el comportamiento y la anatomía de la tarántula, y nos apiñamos ansiosamente alrededor de la tarántula, tomando nota de todas las características aprendidas. Pero no hay mucho tiempo para admirar a la tarántula si  queremos llegar a los monos con tiempo. Así que de mala gana guardamos la cámara, tragamos un poco de té y corremos hacia el porche para empacar nuestras bolsas y ponernos las polainas.

 
Kate admira una tarantula. Foto: S. Perry

Comenzamos abriendo nuestros oídos, quitándonos nuestros "filtros de mono" e intentando identificar cada sonido que escuchamos. El cerebro humano no puede procesar todos los sonidos que se emiten en un bosque tropical, y normalmente estamos tan centrados en los monos que sinceramente no notamos mucho más que los sonidos que ellos producen, tal como los humanos son capaces de bloquear sonidos callejeros y música para enfocarse en una conversación humana. En este momento escuchamos congos, loros, yigüirros, dos tipos de  chochínes, tinamúes, ranas y al menos 6 especies de aves que no puedo identificar: sonidos familiares que escucho regularmente pero que nunca he observado ser producidos. La mayoría de estos sonidos parecen ser "conversaciones": escuchamos intercambios de las mismas vocalizaciones a través de grandes distancias. Kate y yo tratamos de especular qué significa todo esto. ¿Están tratando de atraer compañeros? ¿Defender territorios? El bosque está lleno de preguntas sin respuestas. Es aleccionador pensar en las miles de especies viviendo en este bosque en peligro de extinción, la mayoría de las cuales nunca se estudiarán con suficiente intensidad como para responder incluso preguntas básicas sobre su biología del comportamiento. Alrededor de las 5:30 a.m., comienza el sonido del tráfico en la cercana carretera Pelon, recordándonos que esta área silvestre no es tan grande como se siente, a pesar del hecho de que generalmente pasamos todo el día sin ver a otro humano (aparte de nuestros compañeros moneros).

Pronto detecto un fuerte olor a caca de mono. Y no solo CUALQUIER caca de mono: claramente esta es caca del mono carablanca. Este no es un olor que atraería a la mayoría de las personas; es muy picante y definitivamente no es el tipo de olor que inspira el apetito por el desayuno. Pero para mí, es el olor de los datos y el olor de un día divertido con uno de los animales más fascinantes del mundo. Llamo por radio a David y Summer para decirles que estoy siguiendo el rastro de los monos, pero que esperen hasta que en realidad encuentre a los monos para unírseme. Luego parto río abajo, siguiendo una de sus rutas de viaje hasta que huelo aún más caca de mono, incluso más fresca que la primera. Me detengo a escuchar, y en efecto: ahí están, saltando de rama en rama. Llamo por radio a Summer y David para contarles las buenas noticias y luego gritar dos veces para que puedan escuchar dónde estoy. Nuestro sistema de comunicación a larga  distancia (inventado por nuestro asistente de campo Alex Fuentes, hace 18 años) es un poco como el sistema de "llamada perdida" de los monos. Si grito una vez significa "Estoy aquí, ¿dónde estás?" Dos gritos significan "¡Estoy con los monos!" y tres significa "¡Emergencia! ¡Ven a ayudarme!” Summer grita una vez, haciéndome saber que ha recibido mi mensaje. Unos minutos después, aparecen David y Summer.

"Tu grito suena como el de un chanchero, Summer", dice David amigablemente, renovando una discusión de más temprano en el día. "Realmente hace que me pregunte: ¿todos los miembros de tu cohorte sonaron así?"

Summer resopla indignada. “¡Todo el mundo sigue diciendo eso! ¡Mi grito es perfectamente normal, muchas gracias! ¡Y viaja!”

"Siempre quise investigar la transmisión cultural de los gritos de cohorte a cohorte", dice Susan pensativamente. "Podríamos configurar una base de datos con una grabación del grito de cada persona, algo así como el silbido característico de un delfín".

Escalamos un afloramiento rocoso, buscando nuestro primer animal focal, y nos topamos con una escena pacífica: dos hembras de bajo rango y carácter apacible están escondidas en un arbusto, luciendo somnolientas y acogedoras. Las dos dulces hembras tienen nombres de personalidades masculinas de televisión – personalidades que no se parecen en nada a estos monos. El primer asistente de campo que descubre un bebé recién nacido puede nombrarlo, y a menudo los monos llevan el nombre de las estrellas de cine, actores, cantantes, amigos o familiares favoritos de las personas. Es esencialmente imposible saber si los bebés son machos o hembras durante los primeros meses de vida, debido al clítoris extraordinariamente grande (¡con un hueso!) que poseen las hembras, que imita con bastante eficacia los genitales masculinos. Sin embargo, los monos necesitan un nombre desde el primer día, y esto resultada en algunas discrepancias descabelladas entre los monos y sus homónimos, ambos con respecto al género y la personalidad. En la escena actual, tenemos al pequeño Bruce Willis tratando de olfatear la mano de su amiga Larry David, mientras Larry dormita. Bruce intenta gentilmente insertar el dedo de Larry en la nariz de Bruce. El macho alfa Madison está durmiendo a diez metros de distancia. Larry finalmente se despierta del sueño y pone su mano sobre la nariz de Bruce. Después de unos momentos pacíficos de trance tipo zen, Bruce cambia de posición, presentando su parte superior del cuerpo a Larry en una solicitud de acicalamiento. Pero Larry quiere seguir olfateando las manos: una vez más, pone la mano sobre la nariz de Bruce. ¡Se ven tan relajadas y pacíficas, tan fervientemente en sintonía una con la otra! Estos momentos de relajación son raros en la vida de los monos carablancas, cuyos días generalmente están llenos de desafíos de forrajeo, drama político y encuentros con depredadores, todos los cuales se tratan a gran velocidad. Oler las manos no es un tipo estándar de interacción social para los capuchinos. Más bien, es una tradición venerable que fue inventada por las hembras en el grupo Flakes, que se ha transmitido de amiga a amiga. Solo los monos que tienen una amistad realmente sólida lo hacen, porque requiere mucha confianza dejar que alguien ponga sus dedos, equipados con uñas largas y sucias, dentro de la nariz.

Billie olfatea la mano de Larry. Video: S. Perry

En este caso, el momento de paz no dura mucho. Excalibur, el hijo adolescente de 7 años de la hembra alfa, corre hacia su prima Larry David y la muerde, haciendo que ruja de miedo y rabia por esta extraordinaria injusticia. Excalibur se encuentra en esa edad irritante en la que finalmente se ha dado cuenta de que es lo suficientemente grande y fuerte como para enfrentarse a las hembras adultas, que lo han estado disciplinando durante toda su infancia y fase juvenil. Los machos adultos suelen ser dominantes sobre las hembras adultas, y parte de la estrategia de Excalibur para adquirir este status de macho adulto exaltado incluye intimidar a las hembras adultas cuando menos lo esperan, para que reconozcan su superioridad. Bruce Willis, que está bastante familiarizada con el enfoque de la vida de Excalibur, huye para evitar el ataque en lugar de ayudar a su amiga. Excalibur intensifica su antagonismo con la furiosa Larry, pellizcándola, persiguiéndola y tirando de su cola. Luego la golpea tan fuerte como puede; durante todo este abuso, ella grita continuamente, a todo volumen, el tono de sus gritos subiendo y bajando en oleadas mientras se lanza hacia él.

Excalibur. Foto: S. Perry

Los capuchinos son criaturas entrometidas y obstinadas por naturaleza, y los muchos monos que habían estado acicalándose o durmiendo la siesta ahora se despiertan para expresar sus opiniones sobre el conflicto en desarrollo. Madison, el macho alfa, está empezando a interesarse más. Abre la boca en la clásica cara de amenaza silenciosa mientras observa el proceso, pero debido a que los dos monos se pelean prácticamente uno encima del otro, no podemos distinguir cuál de los dos está siendo apoyado. Los hermanos de Larry, Flamenco y Ray, comienzan a amenazar en la dirección del conflicto mientras Excalibur y Larry se abofetean repetidamente en la cara. Excalibur se lanza contra Larry. La madre y la hermana de Excalibur y un juvenil distante amenazan también; todos parecen indignados por este conflicto de gran volumen durante la siesta. Larry comienza a alejarse de Excalibur mientras él se lanza contra ella repetidamente; a pesar de que parece estar concediendo la derrota, ella continúa expresando vocalmente su disgusto extremo, como si dijera "esta vez te saldrás con la tuya, ¡pero sólo espera!" Cuando Larry finalmente gira la cola y huye, perseguido por Excalibur, la hermana de Excalibur (Viola) grita, esta vez claramente a Larry. En general, los monos carablanca tienden a seguir cuatro reglas al decidir a quién apoyar en un conflicto, pero no pueden seguir todas estas reglas simultáneamente. Apoyan a las hembras sobre los machos, a monos dominantes sobre los subordinados, a sus mejores amigos contra amigos menos cercanos, y a parientes más cercanos sobre parientes menos cercanos. En este caso, la lealtad a los parientes más cercanos parece haber influido en la decisión de Viola. Pobre Larry.

Viola gritando. Foto: S. Perry

Más tarde en el día, Bruce Willis descansa con su hermana menor, Billie. Billie es una de nuestras favoritas porque sobrevivió, a pesar de haber quedado huérfana a la tierna edad de 5 meses y medio. Los bebés generalmente siguen amamantando hasta los dos años de edad, cuando nace su próximo hermano. Las otras hembras del grupo le regalaron leche a Billie, pero aun así no recibió ni cerca de lo que hubiera recibido si su madre hubiera sobrevivido, y su tamaño lo demuestra. Incluso como adulta, se ve mucho más pequeña que otros monos de su edad. Pero en el pasado, Billie fue muy inteligente al saber cuándo gritar y cuándo no gritar para salirse con la suya. Ella protestaba en voz alta por el hostigamiento de sus compañeros de mayor edad, y era una extraña mezcla de dulce y terca. Pero cuando libraba una batalla perdida, también era capaz de ser estoica. Su padre, el macho alfa Quijote, fue muy protector con ella e inventó muchos juegos divertidos para jugar con Bruce y Billie, que generalmente involucraban chuparse los dedos o manipular su rostro de manera divertida. Quizás su pequeño tamaño la protegió un poco de los ataques de hembras adultas, lo que le permitió sobrevivir. Tiende a pasar el rato en el borde del grupo, evitando problemas, excepto cuando se une a combates ruidosos con los bebés y los jóvenes del grupo, donde apenas se distingue de los niños debido a su pequeño tamaño.

Billie jugando con el bebé de su hermana Bruce. Video: S. Perry

Hoy, sin embargo, lo que Billie realmente quiere es una siesta tranquila con su hermana Bruce. Esto, desafortunadamente, no es el plan de Excalibur para ella. Excalibur ha inventado recientemente una forma divertida (para él) de interactuar con las hembras adultas. Corre hacia ellas y usa ambas manos para golpearlas tan fuerte como puede en la espalda, usando sus cuerpos como tambores. ¡Es increíblemente ruidoso! ¡Ay! Durante los primeros veinte segundos de este ataque de percusión, Billie mantiene los ojos cerrados y finge no darse cuenta, aparentemente esperando que si ella no reacciona, Excalibur molestará a alguien más. Pero finalmente él la golpea tan fuerte que ella se desliza de la rama, grita de sorpresa y luego se retira dignamente a un árbol diferente para terminar su siesta. Ella no parece tener tanto miedo de Excalibur como Larry lo mostró antes . Ella no lo toma en cuenta, como si dijera "Los niños serán niños" y continúa con su día. ¡Qué mono tan valiente!

¡Gracias a Tlaoli Fuentes Anaya para ayuda con la traducción!